Valentín, el guardián de los corazones perdidos

Valentín no es un ratón común.
Nació con una misión tan silenciosa como luminosa:
rescatar los corazones que la gente pierde sin darse cuenta.

Algunos se extravían en discusiones,
otros se quedan olvidados en una mudanza,
y hay quienes los esconden tan bien que ni ellos mismos recuerdan dónde.

Valentín los encuentra.
A veces bajo una cama, otras dentro de una taza vacía,
o atrapados entre las hojas de un cuaderno que ya nadie abre.
Los recoge con cuidado, los limpia del polvo y los lleva consigo,
atados a su fino hilo dorado,
esperando el momento exacto para devolverlos.

Nadie sabe cómo logra encontrar a cada corazón,
pero cuentan que el suyo late un poco más fuerte
cuando está cerca de quien lo necesita.

Si alguna vez sientes que te falta algo,
quizás Valentín ya esté en camino,
siguiendo ese hilo invisible
que une a cada corazón con su hogar. ❤️

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